Los Prolongo en la Archicofradía Sacramental de Nuestra Señora de los Dolores de San Juan

Federico Castellón Serrano

Responsable del Archivo Histórico

 

A comienzos del siglo XIX se inscriben en la hermandad los primeros miembros pertenecientes a dos ramas distintas de la familia Prolongo. Por un lado la encabezada por Juan Prolongo Navarro y por otro la de Rafael Prolongo y Gutiérrez[i]. Ambos, dedicados al comercio, implantan sus negocios en la calle San Juan, el primero de ellos al inicio de la popular vía, en dos inmuebles que adquirió haciendo esquina con calle Cisneros[ii], y el segundo, en un local en esquina con calle Cintería.

Juan Prolongo Navarro era hijo del capitán de infantería Antonio Prolongo. Casado con Francisca García de Flores, el 6 de julio de 1790 en la iglesia de San Juan, ingresó en la Archicofradía de Nuestra Señora de los Dolores junto a su mujer, el 26 de abril de 1807[iii]. De su extensa saga hay constancia de su pertenencia a la hermandad de sus hijas Victoria y Gertrudis Prolongo García.

Por su parte Rafael Prolongo y Gutiérrez era el tercer hijo de Gerónimo Prolongo Aycardo, ingresó en la Archicofradía de Nuestra Señora de los Dolores el 1 de noviembre de 1839. En nuestro Archivo queda constancia de la pertenencia también a la corporación de sus hermanos Francisco y Dolores y de su sobrina María Prolongo Serrano[iv].

En el almacén de Juan Prolongo se vendían una gran variedad de artículos: alimentos, vajillas, herramientas, productos químicos y de droguería, combustibles y plantas medicinales. A este floreciente negocio añadió, poco más tarde, la farmacia que adquirió a Pedro Senciani, en la calle Salinas, al frente de la cual puso a su hijo Pablo, que se había licenciado en farmacia en Madrid, y que fue un reputado botánico en su época. La farmacia se trasladó posteriormente a Puerta del Mar, esquina a calle Martínez, donde aún permanece hoy día, propiedad de la familia Rico Nestares.

Por su parte la tienda de Rafael Prolongo vendía también multitud de productos, entre otros muchos, jabón y cerillas, y fabricaba un peculiar salchichón al estilo genovés que fue un auténtico éxito entre los consumidores malagueños. Años más tarde sus descendientes levantarían en Cártama una fábrica donde confeccionaron a gran escala su peculiar y exitoso “salchichón de Málaga” y otras chacinas. Los descendientes de la familia Prolongo vendieron finalmente aquella fábrica en 1937 a la firma catalana Soler, que es la que actualmente la explota.

Como vemos, tanto los Prolongo-García como los Prolongo-Gutiérrez pertenecieron a la Archicofradía de Nuestra Señora de los Dolores, aunque fue Juan Prolongo Navarro quien desarrolló una gran labor en la misma, desempeñando el cargo de Mayordomo durante siete años, entre 1833 y 1834 y entre 1836 y 1842. 

Juan Prolongo Navarro, que dejó meridianamente claras las cuentas de sus años de mandato, incluso redactando por propia iniciativa un documento en el que reconocía una pequeña deuda con la Hermandad “por si calla mi cabeza algún día[1], fue sucedido en el cargo por una personalidad diametralmente opuesta, Francisco Ramírez y Rodríguez, que terminó, tras un escabroso proceso, siendo expulsado de la Corporación por haberse apropiado de diversas cantidades correspondientes a luminarias de nuevos cofrades y al dinero destinado al pago del entierro de un  hermano[v].

Además de su impecable gestión económica, durante su mandato se acordó litografiar y entregar la Carta de Hermandad a todos los archicofrades. Para que constaran en la misma las indulgencias y privilegios que gozaba la cofradía fue necesario solicitar licencia al Sr. Obispo, petición realizada por Juan Prolongo, José Fialo, Guillermo Moreno y Francisco García en nombre de la Archicofradía[vi]. Las entregas de aquellas primeras patentes se registraron en el Libro de Asientos de Hermanos de 1790.

A parte de la numerosa documentación tramitada por Juan Prolongo como mayordomo, y la correspondiente a los gastos de luminarias y entierro de él mismo y de sus hijas Victoria y Gertrudis, también se conservan en nuestro archivo recibos correspondientes a compras de cera realizadas a su hijo Rafael, y de elementos de adorno del trono y de la diadema de la Virgen a su hijo Joaquín.

 

 

 

[i] Los datos relativos a Rafael Prolongo y sus descendientes se han obtenido de ALONSO, Fernando, “Prolongo: Los orígenes de una empresa malagueña bicentenaria” en Diario SUR 15/02/2020, Málaga.

[ii] MUÑOZ CASTILLO, I.M. Contribución al conocimiento de la historia de la farmacia malagueña: don Pablo Prolongo, en Jabega nº61 Málaga, 1988, págs. 64-69.

[iii] A.H.A.D.S.J. Libro 3. p.71

[iv] Rafael y Francisco Prolongo y Gutiérrez aparecen inscritos en el libro AHADSJ. Libro 3, y junto a Dolores y a María Prolongo Serrano en el leg.11.p.4. – Documentación de la Archicofradía Sacramental de Nuestra Señora de los Dolores conservada en el Archivo Municipal de Málaga, 1853 y 1863 (Rafael Prolongo Gutiérrez no aparece en esta última relación de este año pues había fallecido en 1861).

[v] CASTELLÓN SERRANO, F. Nuestro Archivo Histórico. La expulsión del Hermano Mayor Francisco Ramírez y Rodríguez, en Boletín Dolores nº38, Málaga, 2013.

[vi] A.H.A.D.S.J. Leg.10.p.1.d.7

Pies de fotos:
1. A.H.A.D.S.J. Leg. 2. p.10.-d.34  Factura por acompañamiento de los Niños de la Providencia para el entierro de D. Juan Prolongo Navarro.
2. El farmaceutico Pablo Prolongo García, hijo de nuestro Hermano Mayor Juan Prolongo.
3. A.H.A.D.S.J. Leg. 6. p. 1.-d.167  Factura de gastos del sepelio de Gertrudis Prolongo.
4. A.H.A.D.S.J. Leg. 5. p. 1-d.124  Gastos de entierro de Victoria Prolongo.