En torno al 8 de diciembre, la Archicofradía celebra, desde 1982, el Pregón de la Pura y Limpia Concepción de María Santísima. Se trata de una disertación ofrecida cada año por un orador distinto designado por la Junta de Gobierno, que tiene lugar a los pies de Nuestra Señora de los Dolores. Por norma general abre el acto un concierto de música Sacra y siempre finaliza con el rezo de un solemne Te Deum de Acción de Gracias. Aunque a priori pueda no ser entendido como un culto, la Archicofradía lo tiene por tal, como lo demuestra el lugar sacro en donde se pronuncia y la oración con que concluye, amén de otros detalles como el exorno ex profeso de la Sagrada imagen y su altar, o la publicación del acto en una convocatoria de culto y no un cartel.