LA FAMILIA ABELA Y SU RELACIÓN CON DOLORES DE SAN JUAN

Manuel Ángel Abela Luque.

 

Entre finales del siglo XVIII y principios del XIX se asentarían en la ciudad de Málaga, tres familias que compartían el apellido Abela, todas provenientes de su Malta natal: una lo haría en Ronda, los Abela Abela, y las otras dos en la capital, los Abela Duarte y los Abela Spiteri. Estas últimas terminarían uniéndose a través del matrimonio de Magdalena Abela Spiteri (Cospicua, Malta, 1803 – Málaga, 1878) con Joaquín Abela Duarte (Málaga, 1801 – Málaga, 1875), pero sería Francisco, el hermano de Magdalena el que tendría mayor protagonismo en la Hermandad de los Dolores de San Juan.

Francisco Abela Spiteri, nacido en Málaga en 1817, curiosamente en la C/. del Coronel, que es como se denominaba en su época al actual Pasaje de Nuestra Señora de los Dolores de San Juan. Catedrático de latín en el Instituto Provincial (“Gaona”) y director y propietario del “Colegio de San Agustín”, sería su Hermano Mayor desde febrero de 1878 a marzo de 1890, de ahí que la documentación en la que se le menciona, depositada en el archivo histórico de la Archicofradía, sea significativa.

Sus padres, Francisco Abela y Evangelista Spiteri, constan que ya eran hermanos desde 1832, y es de suponer que a partir de esa fecha también ingresaran él y su esposa, María del Carmen de Guzmán López Ontiveros, de la que existe, al igual que de su hermana Magdalena Abela, toda la documentación concerniente a gastos funerarios que corrían a cargo de la hermandad: misas, sepelio, carruajes, velas, etc.

A tenor de la información que nos proporciona el archivo, uno se puede percatar de que en el periodo en que ejerció como Hermano Mayor su mayor preocupación fue que las cuentas de la Archicofradía fueran elevadas y aprobadas en Cabildo, algo que no le resultó nada fácil, por lo que se deduce del cruce de misivas entre él y dos significativos cofrades que habían ocupado los cargos de Tesorero y Hermano Mayor en la Junta de Gobierno: D. Pelegrín Ribelles y D. Ramón Portal.

Por otro lado, también tenemos a Magdalena Abela Spiteri, quién, como mencionamos más arriba, casaría con el también hermano Joaquín Abela Duarte, platero de profesión y uno de los proveedores de la Archicofradía de artículos de orfebrería. Pues bien, tanto Mª del Carmen Abela de Guzmán, hija de Francisco Abela Spiteri, como su prima Julia Abela Abela, serían nombradas Camareras de la Stma. Vírgen en 1901.

Mª del Carmen Abela y Julia Abela estaban casadas, respectivamente, con los hermanos José y Manuel García Guerbós, siendo este último el que algunos años más tarde ocuparía también el cargo de Hermano Mayor de la corporación de San Juan.

En 1880, Francisco Abela Spiteri será nombrado Hermano Mayor de la Sangre, sustituyendo, además, a Jerónimo García Guerbós, hermano de los anteriormente mencionados. En la Hermandad de la Sangre ostentará el cargo hasta 1887, compaginándolo con el de Hermano Mayor de la Archicofradía de Nuestra Señora de los Dolores, en el que permanecerá hasta marzo de 1890.

Francisco fallecería en las salas del Hospital de San Julián (donde ejercía como médico de la beneficencia su hijo Cecilio Abela de Guzmán) el dos de mayo de 1890, a los 72 años de edad y sus restos reposan en el cementerio de San Miguel, en el panteón de los hijos de Antonio García Fernández, padre de los “García Guerbós” y dueño de la joyería “La Perla” que heredarían sus hijos.

No obstante, la figura de Francisco Abela Spiteri seguiría manteniendo relación con la corporación tras su fallecimiento, circulando por su alma y la de su hija María del Carmen, el Jubileo concedido por el Papa Pío IX a la Archicofradía de Nuestra Señora de los Dolores.

Ilustraciones:

  1. Anuncio del Colegio de San Agustín. “El Avisador Malagueño”. 4 de septiembre de 1877
  2. Panteón de Antonio García Fernández e hijos en el cementerio histórico de San Miguel donde reposan los restos de Francisco y Magdalena Abela Spiteri, Mª Carmen Abela de Guzmán, Julia Abela Abela, José y Manuel García Guerbós y otros miembros de la familia de estos últimos. Fotografía de Manuel Ángel Abela Luque, 2016
  3. Interior del panteón. Nichos de Antonio García Fernández, Magdalena Abela y Francisco Abela Spiteri. Fotografía de Manuel Ángel Abela Luque, 2016
  4. Anuncio la Joyería “La Perla”. Guía de Málaga Muñoz Cerisola, 1881.
  5. Archivo Histórico Archicofradía. ES ES29067 AASNSD 3-2-3-Leg. 9. p. 12.-d.2